"Trabaja inteligentemente y no duro."
La gente lo dice todo el tiempo y en una variedad de situaciones, pero ¿alguna vez se ha preguntado cómo podría realmente tomar el viejo adagio y hacerlo práctico?
Parece que los científicos tenían la misma pregunta, y encontraron una solución fácil. Investigadores de la Universidad de Carolina del Norte, HEC Paris y Harvard Business School descubrieron recientemente que cuando los participantes en un estudio intentaron un desafío para la mente y luego escribieron sobre su estrategia y cómo podrían mejorarla en el futuro, obtuvieron un 18% mejor en la prueba la segunda vez que los participantes del grupo de control, que no reflexionaron en absoluto.
Además, estos investigadores descubrieron que reflexionar sobre las lecciones que aprendió de una situación es tan efectivo como enseñarle a otra persona lo que aprendió. (¡Sí, realmente es así de simple!)
Entonces, ¿cómo puede aplicar estos hallazgos a su carrera?
Pruebe esto: después de terminar un proyecto o al final de cada día, dedique 10 minutos a escribir lo que hizo bien y lo que podría mejorar la próxima vez. Comience un diario o documento de Word y simplemente escriba cómo se siente. (Aquí hay algunos otros beneficios que la escritura puede tener en su carrera).
Por ejemplo, imagina que acabas de dar tu primera gran presentación frente a una audiencia. Después de superar la descarga inicial de adrenalina después de su salida del escenario, tómese un par de minutos para escribir cómo cree que fue la presentación, qué hizo bien y qué podría mejorar en el futuro. Antes de tu próximo concierto para hablar en público, repasa tus notas, toma en cuenta tus propios consejos y listo, has trabajado de manera más inteligente y no más duro.