Pensaste que ser un líder sería sencillo.
Trabajaste duro, aprendiste una carrera, pagaste tus cuotas y luego pasaste a la administración, lo que llevó a otros a crear cosas aún mejores. Sigue las reglas sobre el buen liderazgo y su preparación vale la pena.
Como sabes, la realidad de administrar a otros puede ser frustrante y difícil. Las emociones, las personalidades y la política de la oficina causan estragos.
Después de pasar una década trabajando con líderes de todo el mundo, y con mi propia experiencia, he descubierto que las personas a menudo se tropiezan con ideas comunes que no funcionan.
Para mi próximo libro, The Inspiration Code: How the Best Leaders Energize People Every Day , realicé una investigación significativa sobre lo que inspira a las personas a seguir a los demás, así como los comportamientos que los apagan. Aquí hay tres estrategias aparentemente inteligentes que terminan siendo contraproducentes:
1. Trabajas demasiado
Muchas personas adoptan un enfoque de "más es más" en el lugar de trabajo, esforzándose por llegar primero y salir al final. La idea es que las largas horas demostrarán una verdadera dedicación, y usted cree que es importante modelar un comportamiento trabajador.
¿Pero adivina que? Para los líderes, trabajar hasta el agotamiento te hace ver desorganizado (o ineficiente).
Además, el estrés es tóxico para un equipo. Es emocionalmente contagioso. Los empleados percibirán el estrés de sus gerentes, y esto derribará al grupo.
Por supuesto, a veces sentirás que no tienes otra opción. Tal vez eres nuevo en el papel o en medio de un tiempo ocupado y necesitas hacer turnos más largos. Si ese es el caso, hay dos cosas que puede hacer para evitar resultados adversos en su equipo.
Primero, inclúyalos cuando sea posible. Las personas se sienten más empoderadas cuando se dedican a algo importante, en lugar de solo presenciar cómo su jefe toma café y se ve súper estresado. (Bonificación: delegar puede ayudarlo a abandonar la oficina antes).
Segundo, no dejes que se convierta en un hábito. Una vez que tenga los pies nuevamente debajo de usted, haga un esfuerzo consciente para mantener las horas regulares. Esto le mostrará a su equipo que cree en el equilibrio entre la vida laboral y personal para el personal, incluido usted mismo.
2. No dirás "No sé"
Las personas a menudo se sienten incómodas cuando no saben algo. Les preocupa que, si lo admiten, su equipo perderá la fe en ellos.
Incluso he visto tropezar a los líderes más consumados cuando se enfrentan a una pregunta que no pueden responder. Y cuanto más arriba subas en la escalera, más desapegado estarás de las tareas diarias y mayor será la probabilidad de que alguien te haga una pregunta que no sabes.
Si tiene todas las respuestas, cierra las oportunidades de colaboración y disidencia. Admitir que no sabes algo crea espacio para un pensamiento más expansivo, y muestra confianza y disposición para aprender.
Entonces diga "No sé", y luego construya sobre él. Si desea escuchar ideas, inmediatamente pregunte: “¿Qué piensa?” O “¿Qué recomendaría?” Si ninguna de estas opciones parece apropiada, otra opción es, “Esto es lo que puedo decirle” ( seguido de una información que dirige la conversación hacia donde crees que debe ir).
3. Ocultas tus sentimientos
Algunos estereotipan un gerente ideal como estoico y coleccionista. Y si bien no desea perder el control de sus empleados, ser un líder inspirador requiere que muestre algo de emoción.
El buen trabajo a menudo incluye pedirle a las personas que extiendan sus zonas de confort. Significa celebrar el éxito y reconocer (y aprender de) los fracasos. Puede provocar emociones profundas de miedo, ansiedad, emoción o alegría.
Las personas confían en los líderes que consideran auténticos y sinceros. No quieren que les siga un autómata perfecto. Al compartir nuestras emociones, permitimos que otros compartan las suyas, lo que fomenta la inversión personal.
Animo a los líderes a practicar mostrar autenticidad. (Sé que suena completamente contradictorio, ¡pero funciona!) Primero, trabaje en la autenticidad internalizada. Esto significa conocer sus valores fundamentales y su marca y creer verdaderamente en el mensaje que espera comunicar.
Entonces puedes pasar a la autenticidad externalizada. Esto implica ser transparente para quienes lo rodean, usar un lenguaje genuino para "decirlo como usted lo dice en serio" y no tener miedo de expresar vulnerabilidad.
Tu objetivo es ser el líder más fuerte posible. Ha prestado mucha atención a seguir las reglas, pero a veces lo mejor que puede hacer es ignorar los consejos obsoletos. Entonces, si hay un consejo que no funciona para usted y su equipo, no tenga miedo de innovar y probar un enfoque diferente.