Seamos realistas: incluso nuestros trabajos soñados pueden estar llenos de momentos exasperantes, agotadores y francamente irritantes. Si bien ciertas instancias son solo parte del ejercicio de la oficina, otras pueden llevarte a la punta de la locura.
Ya sabes, como estos:
1. Cuando te encuentras con el compañero de trabajo que has estado evitando en el ascensor.