Los domingos por la noche pueden ser los mejores o los peores momentos. Cuando no te gusta tu trabajo, son lo peor: a medida que el sol se hunde lentamente, tu corazón también, ¡y te vas a la cama temiendo el bzzzzz! de la alarma
Pero cuando amas tu trabajo, son los mejores: cuando cenas o lees un libro o envías algunos correos electrónicos, empiezas a emocionarte en la próxima semana. Apaga la luz con una sonrisa, sabiendo que harás algo que disfrutas al día siguiente.
Tener buenas noches de domingo es solo una de las señales reveladoras de que amas tu trabajo. Esta infografía tiene 14 más. (Si no reconoce ninguno de ellos, ¡puede consultar nuestra página de empleos abiertos!)