Un compañero de trabajo consigue la promoción que estabas buscando. Tu primer pensamiento es una punzada de celos: “Brian ha sido promovido. Quería ese papel ”. A partir de ahí, puede comenzar a caminar por un camino negativo. Tienes ganas de mal humor. Brian ya no es un colega agradable y competente, sino claramente, un intrigante burlón. También podría dejar de trabajar tan duro, ya que de todos modos pasa desapercibido.
¿Suena familiar?
Independientemente de los detalles, lo más probable es que haya experimentado la envidia en el lugar de trabajo. (Todo el mundo lo hace en algún momento). Pero, las personas exitosas no se convierten en un Grinch de ojos verdes de un compañero de trabajo, y en su lugar utilizan el sentimiento para impulsar su crecimiento. Usted también puede.
Comience haciéndose estas cuatro preguntas:
1. ¿Realmente quiero lo que tiene?
Margaret consiguió la promoción que deseabas, y estás realmente molesta porque ella la obtuvo en lugar de ti. Pero, pensándolo bien, ¿realmente desea las responsabilidades de un gerente, incluidas las reuniones adicionales y el tiempo dedicado a supervisar a otros, en lugar de trabajar en sus propios proyectos?
Si profundiza en lo que siente, puede descubrir que realmente no quiere lo que provocó la envidia (también conocida como la promoción). Sin embargo, puede ayudarlo a darse cuenta de lo que está buscando. Significado: Si bien no quería la responsabilidad adicional de ser el líder del proyecto, sí desea ser considerado para nuevas oportunidades y ser reconocido y valorado por su arduo trabajo. Tómese el tiempo para aclarar a qué apunta realmente y gaste su energía trabajando para lograr ese objetivo.
2. ¿Qué cambios puedo hacer?
Una vez que haya tenido tiempo de descubrir qué es lo que más quiere en su vida profesional (más responsabilidad, más reconocimiento, más oportunidades de liderazgo), concéntrese en los pasos que puede tomar de inmediato para avanzar en esa dirección.
Comience con pequeños pasos como ser voluntario para diferentes tipos de proyectos, hablar cuando tenga ideas o inscribirse en una clase para desarrollar una nueva habilidad. Puede ser que sientas que es necesario un paso más grande. Si se da cuenta de que cada líder de su organización tiene un MBA, busque programas locales y vea si su empresa tiene algún recurso para el reembolso de la matrícula.
Dar cualquier paso hacia su meta deseada, ya sea un paso de bebé o uno gigante, lo sacará de la envidia y tendrá una mentalidad más positiva. Si deja de morar y comienza a hacerlo, su enfoque y su impulso volverán, y también lo hará su yo más racional y sociable.
3. ¿Qué piensa mi equipo?
Una vez que tenga una idea de lo que le gustaría lograr, realice su propia revisión informal 360 con su jefe, sus compañeros y sus informes directos. Pueden ayudarlo a identificar sus puntos fuertes y sus puntos ciegos.
Haga preguntas como:
- "¿Cómo agrego valor?"
- "¿Qué quieres más de mí?"
- "¿De qué quieres menos?"
- "¿Qué nuevas habilidades podría aprender que beneficiarían al equipo?"
Escuche las áreas donde necesita crecer y luego agradezca a las personas por compartir sus pensamientos con usted. Estas conversaciones también le darán más ideas sobre los cambios que podría hacer para calificar para nuevas oportunidades.
4. ¿Quién puede ayudarme a mejorar?
Los de mejor desempeño trabajan para reconocer y luego eliminar sus debilidades. Si aprende que otros piensan que no está manejando conflictos o responsabilizando a otros, tiene un punto de partida. A partir de ahí, identifique a alguien que se destaque en estas habilidades y pídale que lo entrene. Podría ser un jefe, compañero de trabajo o mentor. ¿Falta de habilidades técnicas? Encuentre un experto que pueda enseñarle, o una clase que pueda tomar. ¿Necesita trabajar en sus presentaciones? Busque un entrenador que lo ayude con su discurso público.
Todos tienen puntos ciegos. Para lograr su objetivo profesional, trabaje en esas áreas para mejorar.
Prestar atención a sus emociones, si se canaliza correctamente, lo guiará en su crecimiento personal. Entonces, la próxima vez que sientas envidia, usa ese sentimiento para ayudarte a tener una idea clara de cómo quieres crecer profesional y personalmente, y luego toma medidas.